VIVIR LA VIDA.
Como un caramelo o como un helado delicioso, la vida pasa para apurarla hasta el último sorbo, hasta el último aliento. Por eso si no existiera la muerte, las personas se aburrirían de saborearla, de vivirla.
Como un caramelo o como un helado delicioso, la vida pasa para apurarla hasta el último sorbo, hasta el último aliento. Por eso si no existiera la muerte, las personas se aburrirían de saborearla, de vivirla.
Cuidado con lo que se pide.
Pidió a San Antonio un novio fiel, que la esperara cuando regresase del trabajo, la llenara de cariño, le gustara dar largos paseos junto a ella, la obedeciera siempre.
Tanto se lo rogó que, San Antonio, generoso, realizó el milagro. Cuando la chica regresó a su hogar, encontró esperándola junto a su puerta de entrada, un lindo perrito.
* * *
Difunto.
- Era el hombre más bueno del mundo- decía, mientras lloraba desconsolada la que fue su esposa.
- Añadiría que el más apetitoso- pensó el gusano.
* * *
Sacerdote Pederasta.
Mientras el agua fría desfilaba por su espalda, sus ojos de niño, seguían el rastro de las gotas que a su paso arrastraban el calor de su cuerpo sucio de hombre.
Con la ducha pretendía ahogar en vano lo que acaba de pasarle. El Padre salió minutos antes y ya limpio por fuera se dispuso a limpiar su alma rezando un padrenuestro.
María José Díaz.
Se nos ocurrió que ya que íbamos a emprender nuestro Camino de peregrinaje a Santiago de Compostela, vestir con camisetas personalizas con el slogan de “Córdoba 2016… nuestro Camino” y por detrás el mapa de nuestra ruta.
Ha sido todo un éxito, más de lo que imaginábamos, nos han parado muchísima gente, miradas continuas, rostros pensativos que se acercaban a preguntar, nos han hecho fotos, hemos tenido que explicar por qué ese 2016, por qué Córdoba se merece ser elegida sintiéndonos improvisados embajadores de nuestra ciudad, con mucho orgullo, por supuesto. Todo un honor.
Ha sido una experiencia inolvidable, gracias a la camiseta hemos hecho muchos amigos. Ha valido la pena hacer el Camino… nuestro camino.
Córdoba está viva, y la formamos personas participativas. Participar para que nos vean, oigan, entiendan que queremos ser reconocidos Capital Europea de la Cultura y no nos podemos quedar quietos, hay que hacerles ver al mundo que estamos aquí, que queremos crecer, que tenemos que luchar para convertirla en la ciudad de encuentro, que llevamos la herencia de pueblo, el legado de siglos de ejemplo de convivencia.
Por nuestro patrimonio, nuestra cultura, por nuestro arte, por nuestra Córdoba.
Conseguimos nuestra Compostela y en este año Xacobeo podemos decir que estuvimos allí y con nosotros, nuestra Ciudad.
Recordar mis sonrisas y encontrarte. Recordar tus palabras y tenerte. Descubrir que siempre estuviste presente para mí. Pero no lo sabía, quizás incluso antes de conocerte y mis ojos ciegos no te veían.
Desear estar bonita para ti. Ahora que las mañanas tienen un encantador aroma… que todo huele diferente, que me siento diferente y me pregunto por qué ahora. Por qué ahora me inunda ese sentimiento hermoso, allí creciste, en mi atardecer y lo inundaste de ternura.
Hace tiempo que te espero y estaba contigo. Como si el tiempo anulara el pasado o acaso siempre fue, desperté y allí estabas tú. Todo cuadra, las piezas encajan.
Inmensas ganas de verte, de hablarte, de mirarte, de contarte...
Tus palabras, tú, merecen un poema, todos, los que no se escribir.
Dedicado a mi amor, en nuestro 24 aniversario.
Hace 24 años éramos unos crios, con 18 y 19 años, ahora con 24 años más (dejar de hacer sumas, que hasta Agosto no es mi cumple ¿eh? )
Aquellos niños nos siguen acompañando, aunque lo hayamos dejado atrás muchas veces, con muchos sueños... algunos cumplidos, otros por realizar, pero aquí estamos para contarlo y seguir compartiendo muchos más.
Encajando las piezas de mi puzzle.
Hay muchas formas de morir,
pero hay que averiguar de qué forma vivir
… eso, además de existir.
La vecina de Jodie Foster
en " La extraña que hay en ti "
Poco que decir, o quizás mucho que se disipó sin dejar apenas rastro ni recuerdo alguno.
Porque ¿dónde van los pensamientos que ni dices, ni escribes, que solo existen unos segundos dentro de ti? aunque mientras lo construías, pensabas que sería una gran historia que contar y te animas, te ilusionas, como si fuera un trozo de nieve luminosa, pero que deja de serlo al derretirse, no dejando casi vestigio de lo que fue, lo mismo que mis palabras no dichas, fundidas en escombros, porque en ese mismo instante tu otra vida, la real, la que te da de comer, la que es, te llama y te arranca de cuajo como tocando tierra y te despierta.
Pero aún sigo durmiendo. Durmiendo mientras vivo, sin vivir, viviendo, vida de estreno a cada segundo y la huelo sin enterarme que huele a nueva.
Esas cosas. Pequeñas inquietudes que bailan en el interior de mi cabeza como cerillas dentro de su caja, que esperan ser encendidas, acariciadas por la imaginación, aunque su fuego sólo dure unos instantes. Los suficientes.
Si tuviera ganas, escribiría.
Si tuviera ganas, inventaría un relato, una historia, un cuento de calleja, un poema.
Si tuviera ganas, buscaría inspiración en una imagen, en una flor, en un paisaje.
Si tuviera ganas, despertaría, pero,
estoy dormida, profundamente dormida y sólo sueño.
Sueño con tener ganas, que escribo una novela, que me leen millones de personas, que viven, que sueñan, que arañan la vida a diario.
Quizás cuando despierte lo haga.
Quizás lo haga, cuando despierte...
Si tuviera ganas.
No dará la felicidad, pero debe de ser algo parecido. Ayuda a encontrarla , al menos solucionas imprevistos, duermes tranquila. Y no me refiero a tener grandes cantidades, sino a tener la tranquilidad de esa estabilidad económica. No teniendo dinero lo valoras más. Lo cuidas, para que te dure, te despojas de pesos innecesarios, de marcas, de tonterías. La mochila te pesa menos. Nos gusta tener, presumir, compararnos, parecer… Cuando no tienes ni presumes, ni quieres comparar, ni que ocho cuartos. No es que quiera tener muchos ingresos, SÍ que estos sigan entrando. Me importa un pimiento no tener el último modelo de móvil, de coche, de zapatos, pero SÍ ganar lo que me como. Vale, estoy a dieta, ahorro en mahonesas, mantequillas, pan rallado, natas, chuches, cerveza, no voy al gimnasio, pero me conozco mi ciudad de cabo a rabo, porque me la pateo a diario y se me está poniendo un “pompis” que ni el mejor Leg Magic. Ahorra que te ahorra, por no ir, no voy ni a la pelu. Yo misma me pongo el tinte, no me acuerdo de la última mascarilla que me hicieron en mi carita bonita, que como está tristona está mustia, que ahora que lo pienso no he pisado ni un poquito la arena de la playa este año, ni tan siquiera dominguera he sido. A mí todo esto me da igual, que me da lo mismo, en serio, que las cosas tienen la importancia que le queramos dar. Esto es una cadena y si no se compra o paga, los demás dejan de ingresar eso tan valioso que llamamos dinero. ¿Qué da la felicidad? En estos momentos me la daría tener un trabajo, ni mejor, ni peor, un trabajo que me permitiera estar tranquila.
Eso es lo que da la felicidad: la tranquilidad, ya lo he descubierto. La felicidad está en la estabilidad emocional, de hecho, dicen que las personas divorciadas y las viudas, en su día a día son bastantes más infelices que las casadas. Entonces podemos pensar que el matrimonio es fuente de felicidad. Pero sin tirarnos la vajilla a la cabeza, que entonces ya esa felicidad se esfuma. El matrimonio unido a que ambos o al menos un miembro, tenga un trabajo estable, que como están las cosas, ni los dos trabajando a veces hay manera de levantar cabeza.Lo que si doy fe, que sin trabajo, aguantas unos meses con buen ánimo, pero esa incertidumbre te va minando por dentro y puedes que seas muy positiva, pero llega un momento que te da todo igual. Que ves la vida pasar como un espectador. Al menos me reconforta saber que estoy sana. Punto fundamental para la felicidad (tranquilidad) ya que si ésta falla, hará que la tal felicidad se esfume, si tú o los tuyos de salud anden regular. Dicen que son más felices los creyentes que los agnósticos. Vale, pues voy a creer en algo. Creo que… voy a encontrar un trabajo. Yo creo en mí ¿pero quién más lo hará? Un trabajo para ser feliz o al menos para estar tranquila. Eso quiero. En eso creo y voy a luchar por ese, ahora, MI SUEÑO.
Buenos días, le comunico que no ha sido seleccionada para el puesto de contable. No obstante, tras la entrevista personal realizada, su perfil nos ha parecido muy interesante y no dudaremos en recomendarle para cualquier otra oferta de trabajo que tengamos disponible en su provincia.
Gracias por su colaboración.
Un saludo.
Fulanita de Tal
(Dpto. Selección)
Tengo buen ánimo, eso me dicen. Que soy animosa, diría mi amiga Mari Pili.
Animo, animosa, me animo a mí misma. Que porque ahora engorde la lista, listísima del paro, no me voy a poner a llorar. Bueno a llorar me pongo, que las lágrimas son gratis y además como dicen que retenemos líquidos, pues le doy vía libre y ya puestos me enfado conmigo misma y con el mundo, que si el mundo no tiene culpa, menos la tengo yo.
Porque… a ver qué es lo que he hecho desde que era un "mico" sino ha sido trabajar, y estudiar; estudiar y trabajar, criar a mis hijos, que ya no son unos críos, intentando crear un hogar con críos.
… y ahora, no sé qué hacer con el tiempo. Yo siempre que me quejé de falta de él y de golpe se me amontona y siento su peso sobre mis espaldas.
No quiero estar parada, no puedo, no debo, que no.
Mi amigo José dice que estaré parada, pero que no paro ni un rato y es que siempre que me pregunta le digo que he ido aquí, que he ido allí, que he mandado el currículum aquí, allá y un poquito más lejos.
Zapatero, zapatón, zarpazo te metía una que conozco, que no soy yo, ni mucho menos, que ahora eres como quien dice, mi jefe o al menos el Estado que gobiernas me ingresa mensualmente mi paga por desempleada.
Que ya lo sabemos, que aquí no hay crisis ni nada, sobre todo, nada. Nada se hace, y la tal crisis que no hay, pero lo parece, hará que pronto, muchos, demasiados, nademos en la más pura miseria. Sigamos mirando hacia otro lado, mientras nuestros bolsillos sigan llenándose (a los que la crisis no le afecte, claro) siendo prudentes en nuestras declaraciones, en vez de aceptar que tenemos problemas y bien gordos, que nos terminará por dilapidar a todos en mayor o menor medida. Aceptarlo para seguidamente hacerle frente, tomando efectivas medidas, que esto va de mal en peor. Aceptar que 36.849 personas y no digamos sus familias, en el mes pasado de Junio se quedaron paradas. Yo sólo soy una más, que ya estaba en la cola, antes de esa cifra. Pero espero que no sólo sea un simple número. Unas de las 2.390.424 personas, 25, 26, 27, 28… ¿Seguimos?
(La "foto" la cogí de aquí prestada)
El silencio.
"Todas las grandes obras son hijas del silencio. Sólo en el silencio encuentra el hombre las raíces profundas de las que se alimenta la verdadera creación. El silencio es la máxima expresión de la sabiduría". Jesús Quintero.
Siempre me emociona cuando habla, cuando reflexiona, cuando dice cosas como:
- Yo a ti, te conozco de algo, espera...
- Ah, ya, coíncidimos la otra noche en un sueño.
Con su permiso, espero que no le moleste que hable y utilice algunas de sus sabias palabra. Aquí os dejo una reflexión de hace un tiempo, de un tiempo atrás:
Reflexiones de Jesús Quintero.
Con el tiempo entiendes que los verdaderos amigos son contados, y que el que no lucha por ellos, tarde o temprano se verá rodeado de amistades falsas.
Con el tiempo aprendes que disculpar cualquiera lo hace, pero perdonar es sólo de almas grandes.
Con el tiempo comprendes que si has herido a un amigo duramente, muy probablemente la amistad jamás volverá a ser igual.
Con el tiempo te darás cuenta de que cada experiencia vivida con cada persona es irrepetible.
Con el tiempo te das cuenta de que en realidad lo mejor no era el futuro, sino el momento que estabas viviendo justo en ese instante.
Pero desafortunadamente, sólo con el tiempo uno aprende...
Nunca seremos iguales, ni falta que hace.
No hay nada más aburrido que la igualdad.
Lo que hace falta es que nos respetemos y respetemos nuestras diferencias. Que nos sintamos solidarios y unidos.
Que nadie explote a nadie. Que nadie desprecie a nadie, lo avasalle o lo humille. Que nadie se crea superior.
Que no seamos iguales no quiere decir que seamos mejores ni peores, sólo diferentes.
Paciencia hermano, todo esto pasará.
Pasarán el paro, el hambre, la injusticia, la violencia, la carrera de armamentos, los bloques, los días y las noches de miedo y de miseria.
Pasarán la incomprensión, la intolerancia, el fanatismo, los valores eternos, los deberes, las órdenes, las leyes...
Pasarán los hombres cuyo nombre hoy es inevitable y las causas por las que se nos pide trabajar sin descanso y morir si es preciso.
Los Estados Unidos y la URSS pasarán como pasaron otros imperios, caerán como cayeron Persia, Roma o Cartago.
Pasarán las naciones y sus sagrados símbolos.
Pasarán los ejércitos, las guerras, las fronteras.
Pasarán la crisis, todas las crisis.
No hay tragedia que dure eternamente ni fiesta que no acabe.
Paciencia, hermano, sólo es cuestión de tiempo. Todo esto pasará... aunque ni tú ni nadie pueda tal vez contarlo.
Podéis escucharlo, en su página y ver su programa, que aquí en Andalucía tenemos la suerte de verlo y escucharlo, cada martes noche, en Canal Sur.
Mi admiración total a su persona.
(La fotografía la tomé en un bosque por Roscenvalles)
Todo pasa y todo queda,
pero lo nuestro es pasar,
pasar haciendo caminos,
caminos sobre el mar.
Nunca perseguí la gloria,
ni dejar en la memoria
de los hombres mi canción;
yo amo los mundos sutiles,
ingrávidos y gentiles,
como pompas de jabón.
Me gusta verlos pintarse
de sol y grana, volar
bajo el cielo azul, temblar
súbitamente y quebrarse...
Nunca perseguí la gloria.
Caminante, son tus huellas
el camino y nada más;
caminante, no hay camino,
se hace camino al andar.
Al andar se hace camino
y al volver la vista atrás
se ve la senda que nunca
se ha de volver a pisar.
Caminante no hay camino
sino estelas en la mar...
Hace algún tiempo en ese lugar
donde hoy los bosques se visten de espinos
se oyó la voz de un poeta gritar
"Caminante no hay camino,
se hace camino al andar..."
Golpe a golpe, verso a verso...
Murió el poeta lejos del hogar.
Le cubre el polvo de un país vecino.
Al alejarse le vieron llorar.
"Caminante no hay camino,
se hace camino al andar..."
Golpe a golpe, verso a verso...
Cuando el jilguero no puede cantar.
Cuando el poeta es un peregrino,
cuando de nada nos sirve rezar.
"Caminante no hay camino,
se hace camino al andar..."
Golpe a golpe, verso a verso.
Antonio Machado.
Pilar, me recordó éste poema. Ahora tomó diferente significado. Gracias, amiga.
Quería poner el video de Joan Manuel Serrat, pero algún detalle se me escapa y no acabo de aprender cómo se hace. Pero picar en su nombre y podéis escucharlo, si os apetece.
Hay libros y libros. Libros que te hacen soñar y otros en los que te envuelven de tal forma, que tienes que seguirlos, dejarte llevar por ellos y sentirte parte de él.
Eso ocurrió con el libro que nos dejó nuestro amigo Jose (sin tilde, como el de la canción, pero con acento en la “o”)
Él, junto a Pili, su esposa, nuestra amiga, emprendieron su primer Camino, el año pasado y tuvieron que volver, sintieron esa necesidad, como si aquello sólo fuera el comienzo de un algo, de un todo, de un empezar a caminar hacía un sendero más allá del tiempo. Tiempos comunes, a destiempo, por lugares atemporales. ¿Qué era aquello que nos intentaba comunicar, que nos querían trasmitir más allá de las palabras? Esa intriga, esa pasión que nos trasmitió, esos caminos compartidos, con ellos y con otra pareja que se nos unió (Antonio y Mª Jose, mis cuñados) fueron, dijéramos, los culpables, los causantes de que nos animáramos a emprender nuestro Camino, el Camino… dicen que llevarían a una ciudad Santa, a una de las tres ciudades santas: Jerusalén, Roma y Compostela, nuestro destino. El mismo Camino que millones y millones de personas ya realizaron, quizás pisando por los mismos espacios. Qué curioso ¿no? Te hace pensar, en el trascurrir de los años, en nuestro pasado, como de alguna forma es... como si nos diéramos la mano, como si ellos nos la extendiera, como parte de herencia. La herencia, la mano, la cadena... que dejaremos de alguna forma, a los que se queden aquí, cuando ya no estemos, dejemos de estar, estando. .... ya me estoy liando, con estar, estando, estuve... porque estar, estoy... ¿por dónde estás tú?... Bueno, me voy que hicimos la promesa de entregar a nuestro regreso una concha, una vieira , con nuestro nombre inscrito dentro, a modo de firma, de huella, de promesa cumplida... como tantos otr@s peregrin@s, en la iglesia de Santiago de mi ciudad. ...>...>...>...
LUNES 07/04/08
- 7:39 -> 9:32 Córdoba- Madrid (AVE)
- 10:35 -> 13:34 Madrid- Pamplona
- 18:00 -> 19:10 Pamplona- Roncesvalles (Autocar) -> A las 20:00 Misa del peregrino.
MARTES 08/04/08
- Roncesvalles -> Zubiri (21,8 Km.)
MIÉRCOLES 09/04/08
- Zubiri -> Pamplona/Iruña (21Km.)
JUEVES 10/04/08
- Pamplona -> Puente la Reina/Gares (24Km.)
VIERNES 11/04/08
- Puente la Reina -> Estella/Lizarra (21,8 Km.)
SABADO 12/04/04
- Estella -> Los Arcos (21,3 Km.)
DOMINGO 13/04/08
- Los Arcos -> Logroño (27,9 Km.) ¡!!!!!! (A las 6 de la mañana, hay que estar haciendo el Camino para poder coger autobús, a las 14:50, que nos llevará a Lugo sobre 22:20)
LUNES 14/04/08
- Lugo ( Autocar hasta Pedrouzo)
- Pedrouzo -> Santiago de Compostela (20,1Km.)
MARTES 15/04/08
- Visita turística por Santiago de Compostela, hasta las 22:20 horas, que cogeremos el tren hacía Madrid (07:45 del Miércoles 16)
MIÉRCOLES 16/04/08
- Madrid (10:05) -> (12:17) Regreso a casita, con nuestras ampollitas.
A lo tonto a lo tonto me he bebido una botella de vodka. No ha sido en un día ni en dos, cuidado, ha sido a lo tonto. Éstas son las consecuencias de aficionarse al Bloody Mary, que es una de esas bebidas con las que aquellos a los que el alcohol nos gusta regular, nos volvemos un poco borrachines. Pero siendo sincera yo diría que la culpa de mi afición al alcohol no la tiene el Bloody Mary, la culpa la tiene la Guardia Civil, y explico esta afirmación que de momento puede sonar algo temeraria de cara a un cuerpo que cumple un servicio a la sociedad:
No es que fuera un guardia civil el que me enseñara a aliñar el zumo de tomate, es que nosotros, mi santo y o, matrimonio moderno, que está un poco en la línea de los matrimonios de la Europa del bienestar, seguimos la costumbre tan común entre las parejas holandesas, danesas (países civilizados, no como el nuestro), de que cuando se sale por ahí a cenar sólo bebe el que va de copiloto, y se aguanta el que conduce. Hasta ahí, la regla parece perfecta, pero el problema es que, a pesar de que mi necrológica destacará que fui una mujer adelantada a mi época, yo no sé conducir. Lo intenté, me apunté a una autoescuela, pero cuando llegué a las clases prácticas, me senté sin pensarlo en el asiento de atrás y el profesor me soltó: “Señorita, que esto no es un taxi”, y eso me hizo pensar que, efectivamente, lo mío no era la conducción.
Consecuencia, todo lo que no bebe mi santo en los restaurantes me lo bebo yo. Él me dice:
- Cariño, no hace falta que apures la botella hasta el fondo.
- Es que el culillo es lo mejor- le digo, ya con la risa tonta-. Además, yo qué sé, me da mal rollo dejar cosas en el plato.
- El vino no está en el plato, está en el vaso.
Y entonces me río más, porque el alcohol ayuda a desinhibirse a las personas, que como yo, somos en el fondo grandes tímidas. Luego llega el camarero y pregunta:
- ¿Un licorcito de la casa?
Mi santo dice “no”, porque hay veces que hace intentonas de ordeno y mando, pero yo, delante del camarero y todo, porque el alcohol me hace ser así de espontánea, le corto:
- Checheché, oyes, ¡no querrás tú!, pero lo que es yo, me dejo invitar por este señor tan amable.
Le caigo fenomenal a los camareros. La cosa es que luego nos montamos en el coche para volver a casa (yo a veces me doy con la puerta del coche en la cabeza al entrar, no sé por qué), y me entra un sueñecillo ceporrón que se me cae la cabeza y sueño que estoy en la cubierta de un barco bailando la Bomba con el camarero. El otro día, entre dichos sueños, oí a mi santo que decía:
- Mira, cariño, la guardia civil. Por mí que me paren, que voy limpio, no llego al 0,3.
Está claro que el resto de miligramos en sangre lo suelo llevar yo. Pero a la guardia civil le chupa un pie que mi santo se esté haciendo un adicto a las coca-colas y yo vaya por el camino de la depravación. Ellos tienen su ética: ven pasar un coche a la velocidad estipulada (ya te digo, mi santo es un amante de la legalidad), y les da igual que la copiloto vaya con la cabeza torcida para un lado. No es que esté animando a la Dirección General de Tráfico a que saquen una norma para que le hagan la prueba del alcohol también al copiloto. No se me malentienda. Sólo aviso que si me convierto en una alcohólica pienso demandar al Glorioso Cuerpo y a Smirnoff, la marca del vodka que me vuelve loca.
(Extraido del libro "Tinto de Verano" Elvira Lindo)
¿Porqué mi memoria se irá de picnic cuando más la necesito? Llevo un rato buscándola como loca y tengo la sensación que se me escapó para marcharse de fiesta.
Me da igual dónde vaya, pero decidle si la véis, que esta tarde a eso de las 19:00 la quiero en mi azotea, sin falta. Que tengo un examen de… de… de… espera, que no me acuerdo, de… Servicios Financieros, eso era... y no me puede fallar.
No puede, porque no puedo quedar mal, porque una tiene su fama y la gente piensa si tiene memoria, que entiendo de intereses simples, comerciales y sus lios.Porque eso es lo que es, un lio en la memoria que me ha tocado, que por equivocación (eso espero) me la dieron de pez.
… Y la vida de un pez, en clase es muy dura. Doy fe.
La vida es puro ruido entre dos silencios abismales.
Silencio antes de nacer, silencio después de la muerte.
(Isabel Allende)
El autor relata la vida amorosa de András, un adolescente húngaro, en plena Segunda Guerra Mundial, hasta su madurez. Su despertar erótico en manos de mujeres por las que siente verdadera devoción, fervor, pasión, a las que prefiere: mujeres de treinta, de cuarenta años. Como su vecina, cuarentona lo introduce en el mundo del placer y de los libros y así una a una va dejando la huella por las guía sus pasos.
Cada una de estas mujeres marcará su vida sentimental, como he dicho; aprovechará lo que le ofrecen, sus enseñanzas, sus conocimientos de la vida, lo hará iniciarse en el arte de amar, “clases” impartidas desde la experiencia, sin perder el humor, aderezados con un poquito de cinismo y otro tanto de tristeza oculta, disimulada, pero que se puede advertir en el fondo de sus letras.
El escenario transcurre en el periodo comprendido entre la Segunda Guerra Mundial y la sublevación húngara, en, Austria, Italia, Canadá y Estados Unidos. Escenarios en los que busca el amor y nos hace una fotografía diferente, como diferente son los estilos de vida por los que explora, por los que viaja.
Una Cita:
“Preferimos considerarnos fracasados a renunciar a nuestra fe en la posibilidad de que la perfección exista. Nos aferramos a la ilusión del amor eterno negando validez al temporal. Duele menos pensar: “Soy superficial”, “Es egocéntrica”, “No podíamos comunicarnos”, “Era sólo atracción física” que aceptar el simple hecho de que el amor es sentimiento pasajero que acaba por causas ajenos a nuestro control e, incluso, a nuestra personalidad. Pero ¿quién puede tranquilizarse con sus propias reflexiones? “No hay argumento que pueda llenar el vacío que deja el sentimiento que ha muerto: recordatorio del vacío terminal, nuestra inconstancia final. Hasta a la vida le somos infieles”
Lo que más me gustó:
El respeto hacia la persona, la tolerancia, el deseo del conocimiento del otro. Para amar, hay que ponerse en la piel de la otra persona, pensar como ella para entenderla. Darle la oportunidad de conocerla olvidándose de los estereotipos.
Como dice el autor: Este libro está dirigido a los hombres jóvenes y dedicado a las mujeres maduras; y la relación entre unos y otras es mi propuesta.
Ya somos una más en casa. La muñequita se llama Natalia, tiene un día casi exacto, nació ayer día 16 de Julio, día del Carmen, a las 20:56 min. Pesó 3,420kgr.Qué paz al tenerla en brazos, qué cosa más grande. Qué milagro la vida. Será lo más natural del mundo (y tanto) pero no deja de sorprenderme. Es algo inmenso, difícil de describir, es como un gran milagro. El milagro de la vida, el milagro de nacer, como el nombre que han elegido para la bebita: Natalia (nacida, nacer, natal, nacimiento, natividad, navidad)
Hubo una santa Natalia que nació en Córdoba en la época de Abderramán II, y su onomástica se celebra el 27 de Julio, aunque hubo otra santa Natalia, que era de Constantinopla y su fiesta se celebra el 1 de diciembre.
Ya vuelvo a tener ganas de tenerla en brazos. Pero sólo un ratito, para que se calme las ganas de niña. Luego para sus papis, que ahora es tiempo de disfrutar de nosotros. Ese tiempo ya pasó, pero al cambiarle el pañal (parecía inmenso y eso que sería de primera postura) retrocedí en un segundo cuando mis hijos eran bebes. Ahora los miro ya hombres y de nuevo me asombro del milagro de la vida.
Venga, venga a hacer niños, que está de moda y el gobierno regala 2500 eurotes. Al menos, eso dicen.
A veces, sucede eso, quizás más de lo que parezca, nos volvemos sord@s, mud@s, cieg@s, cuando la realidad que tenemos delante no nos convence, no nos la llegamos a creer y por lo tanto a aceptar.
A ver qué os parece.